martes, 18 de noviembre de 2008

Ciudad de la paz.


Jerusalén significa en hebreo "ciudad de la paz". Que contradición os estaréis preguntando. Jerusalén es ahora pieza clave en un conflicto que parece no acabar con el paso de los años. Es mucha la sangre derramada y mucho el daño causado. Mucho el odio.

Pero no creáis. En otro tiempo, durante siglos, fue realmente un lugar de paz. Judíos, cristianos y musulmanes convivían en perfecta armonía y sin fronteras que les separara. Se respetaban y aceptaban sus leyes y sus religiones. Pero llegaron otros intereses y rompieron ese clima de tolerancia.

Apareció el sionismo. Surgió en Europa durante y posteriormente a la II Guerra Mundial. Los judíos golpeados duramente por los nazis exigen compensación y solicitan un territorio en Oriente Medio para crear su propio estado. Quieren una tierra que consideraban suya, su tierra prometida, la tierra de sus orígenes. Sin embargo, era también tierra de palestinos. Tenían los mismos derechos.

La ONU, que ya por aquel entonces hacía lo que le decían, aprobó la creación de un Estado judío. Eso suponía que miles de palestinos se verían desplazados o se verían obligados a vivir bajo el dominio de un estado que no era el suyo. La cosa se fue complicando hasta degenerar en lo que hoy conocemos. No me gustaría pasar por alto una cosa. El primer atentado en la zona fue de judios contra palestinos. Nació Israel y con el apoyo militar de EEUU venció a los árabes y se anexionó más territorios de lo que les correspondían. Es muy fácil luchar contra los tirachinas y las piedras.

El pasado fin de semana disfrute con la película "Oh, Jerusalén". Un retrato de lo que ocurrió en aquellos primeros días de conflicto. Una película de amistad, amor, odio y guerra. Una obra cuyo eje central es Jerusalén. Perdería el tiempo intentando describir la misma. Sólo si se ve se puede descubrir la importancia de esta ciudad para una posible resolución del conflicto.


1 comentario:

Elphaba dijo...

Estupendo post. Un buen amigo mío está muy interesado en este conflicto y me ha hablado mucho de estas cosas. Me gusta contemplar la historia y la actualidad de la forma más equilibrada y objetiva posible. Hace poco me interesé precisamente por esa película, que ahora me da más ganas de ver.