
Hace pocos días reclamaba desde estas líneas la presencia de alguien que apostara por la refundación de la izquierda. Pues bien, este fin de semana, y dando un toque de premonición a lo escrito con anterioridad, ese alguien surgió. Gaspar Llamazares, es ya ex Coordinador General de Izquierda Unida. Presentó su dimisión en la asamblea que el partido celebró en Mieres. Llamazares explicó que lo hacía dentro de este marco porque hacerlo en la próxima Asamblea General de IU (en la que se elegirá al nuevo Coordinador o Coordinadora) sería marcar esta con un toque de pasado y que lo que hay que hacer es tener visión de futuro. Según propias palabras “hay que refundar la izquierda”.
Tuve la oportunidad de escuchar a Llamazares ayer en una entrevista radiofónica. Me gustó. Me quedé, de entre sus palabras, con una clara autocrítica hacía todos los que nos consideramos izquierda. “En ocasiones somos como una izquierda sectaria, cerrada, del pasado…” señalaba. Y tiene razón. Creo que la historia va cambiando y parece que la izquierda se ha quedado en tiempos pasados, viviendo de antiguas rentas. Una palabra muy típica en toda propaganda roja (que bonito color) es Resiste. Pues eso. Que nos hemos quedado ahí, resistiendo, rodeados de un cerco en el que nos retroalimentamos nosotros mismos, en ocasiones, con nuestro victivismo. Llamazares apuesta por pasar de la resistencia a la ofensiva y sobre todo ahora que son tiempos difíciles para la clase obrera. Pero además son tiempos difíciles para muchos más colectivos. Por eso, el ex coordinador de IU, abogaba por una izquierda más heterodoxa. Sin duda, a mi entender, una forma de reforzar y enriquecer los valores de la izquierda mientras se amoldan a los nuevos tiempos.
Pienso que la caída de IU no se ha debido a un solo motivo sino a un conjunto de circunstancias, en su mayoría, externas al partido. Está claro (y el que no lo vea pues que se haga un chequeo democrático) que la actual ley electoral es injusta. El arco parlamentario no refleja el verdadero apoyo de los ciudadanos a determinados partidos. Hay formaciones que obteniendo muchísimos menos votos que IU tiene el doble o más de representación parlamentaria. Por otro lado, los dos partidos mayoritarios cada vez lo son más. Eso sin duda supone un descenso de la calidad democrática del país. Llamazares explicó que el porcentaje de bipartidismo en España “es mayor ya que en Gran Bretaña”. Esto lo saben tanto PP y PSOE y se aprovechan de ello. Mientras la derecha suelta sus dobermans, el PSOE llama al voto útil.
La presentadora le preguntó cómo debía llamarle a partir de ahora que ya no era el Coordinador General. La respuesta me encantó (por su sinceridad, por su compromiso…y quizás también por la referencia cinéfila). Llamazares dejó claro que le podía llamar ciudadano Llamazares. Explicó que a pesar de dejar el cargo iba a continuar como Diputado porque su compromiso con los ciudadanos y con la izquierda continuaba.
Siempre he creído que este hombre ha tenido muy buenas ideas, ha hecho muy justas reivindicaciones, ha tenido mucho respeto hacía todo el mundo. Quizás le ha faltado un poco de fuerza (que no quiere decir ni agresividad ni falta de respeto). Ahora habrá que ver quién toma el testigo y si, al igual que a Llamazares, su relevo no recibe tantas palmaditas en la espalda y sí verdaderos votos de izquierdas.
1 comentario:
el problema de llamazares es que es honesto. no hombre! ¿no quedábamos en que serías político?
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